La Diplomacia Deportiva puede ayudar a conformar una plataforma común de objetivos estratégicos, como instrumento útil para las relaciones internacionales, definiendo objetivos a los que puede y debe contribuir el deporte e incluirlo dentro de una estrategia de acción estructurada e implantada.
Este canal promueve trascender los límites de nuestra nación desde una concepción de la ciudadanía global, procurando convertir a cada uno de nuestros deportistas en ciudadanos del mundo, propicia la solidaridad e integración entre las diversas colectividades que residen en nuestro país por intermedio de sus respectivas sedes diplomáticas, como así también el intercambio de atletas para que accedan a conocimientos y desarrollos de preparación física a nivel mundial.
Desarrollar el vínculo con cada una de las representaciones diplomáticas de diversas pasiones en nuestro país nos posibilitará la obtención de una concreción rápida y afectiva de los objetivos propuestos.